Un carabinero muerto, 42 oficiales heridos y más de 300 detenidos fue el saldo de una nueva conmemoración del 11 de septiembre en Santiago de Chile. Esta noche se vio marcada por violentos incidentes en distintos lugares de la capital, en donde se produjeron enfrentamientos entre la fuerza policial y manifestantes, quienes pusieron barricadas, saquearon locales comerciales y atacaron automóviles en la vía pública.
Las autoridades de gobierno declararon su unánime condena a los hechos de violencia, entre los cuales la mandataria, Michelle Bachelet, manifestó que “Quisiera señalar que a mí me parece inaceptable que en una fecha que tiene un sentido para los chilenos de mirar cómo somos capaces de vivir en democracia y seguir construyendo un país más justo pero a la vez más democrático, es que haya actos de violencia, de matonaje y de pillaje como los que hemos visto", mientras visitaba a los carabineros heridos en el hospital institucional. Del mismo modo, la presidenta señalo que esperaba que la justicia actúe de forma eficaz, para evitar que estos hechos de violencia se vuelvan a repetir.
Dentro de los detenidos, según el informe de carabineros, se encuentran 62 menores de edad, quienes serian formalizados el día de hoy por la justicia penal.
El director de la policía uniformada, General José Bernales declaró frente a la muerte de un oficial en los actos de violencia en la capital que “Matar a un carabinero en este país, y lo digo de corazón, es matar el derecho… Matar a un carabinero es matar el país, y eso es lo que hicieron anoche”. En este mismo sentido, el General Bernales exigió el máximo rigor de la ley, señalando: “nosotros ya hicimos nuestra parte y ahora le toca actuar a ellos”, refiriéndose al accionar de la justicia.
Por otra parte, estos hechos pasaron a ser el término de una serie de actividades y conmemoraciones de los 34 años del golpe militar de 1973. El pasado domingo 9 fue el primero de los actos, llamado por organizaciones de derechos humanos y el partido comunista, que fue una marcha en dirección al memorial de los detenidos desaparecidos en el Cementerio General, en la comuna de Recoleta. Este martes se permitió a grupos pequeños acercarse a dejar exequias y arreglos a la puerta de Bandera 80 y al monumento del ex presidente Salvador Allende ubicado en la Plaza de la Constitución, en Santiago, hechos que no estuvieron exentos de algunos disturbios.
Las autoridades de gobierno declararon su unánime condena a los hechos de violencia, entre los cuales la mandataria, Michelle Bachelet, manifestó que “Quisiera señalar que a mí me parece inaceptable que en una fecha que tiene un sentido para los chilenos de mirar cómo somos capaces de vivir en democracia y seguir construyendo un país más justo pero a la vez más democrático, es que haya actos de violencia, de matonaje y de pillaje como los que hemos visto", mientras visitaba a los carabineros heridos en el hospital institucional. Del mismo modo, la presidenta señalo que esperaba que la justicia actúe de forma eficaz, para evitar que estos hechos de violencia se vuelvan a repetir.
Dentro de los detenidos, según el informe de carabineros, se encuentran 62 menores de edad, quienes serian formalizados el día de hoy por la justicia penal.
El director de la policía uniformada, General José Bernales declaró frente a la muerte de un oficial en los actos de violencia en la capital que “Matar a un carabinero en este país, y lo digo de corazón, es matar el derecho… Matar a un carabinero es matar el país, y eso es lo que hicieron anoche”. En este mismo sentido, el General Bernales exigió el máximo rigor de la ley, señalando: “nosotros ya hicimos nuestra parte y ahora le toca actuar a ellos”, refiriéndose al accionar de la justicia.
Por otra parte, estos hechos pasaron a ser el término de una serie de actividades y conmemoraciones de los 34 años del golpe militar de 1973. El pasado domingo 9 fue el primero de los actos, llamado por organizaciones de derechos humanos y el partido comunista, que fue una marcha en dirección al memorial de los detenidos desaparecidos en el Cementerio General, en la comuna de Recoleta. Este martes se permitió a grupos pequeños acercarse a dejar exequias y arreglos a la puerta de Bandera 80 y al monumento del ex presidente Salvador Allende ubicado en la Plaza de la Constitución, en Santiago, hechos que no estuvieron exentos de algunos disturbios.